Existen muchos mitos sobre los electrodomésticos que nos confunden y, lo que es peor: nos hacen perder dinero. Es hora de desterrarlos de una vez por todas. Continuamos con la parte 2.
3- El microondas
El microondas es un electrodoméstico que nos ha facilitado mucho la vida en la cocina. Su rapidez y eficiencia para calentar o cocinar alimentos es indiscutible, pero aún así existe un mito muy extendido que dice que la radiación que emite el microondas es peligrosa para nuestra salud. ¿Qué hay de cierto en esto?
Lo primero que debemos tener en cuenta es que la radiación que utilizan los microondas es no ionizante. Esto significa que no tiene la capacidad de alterar el ADN de las células de nuestro cuerpo, como sí lo hacen otras formas de radiación ionizante, como los rayos X o las radiaciones nucleares.
La radiación que utilizan los microondas es de baja frecuencia y no tiene la energía suficiente para romper los electrones de las moléculas del cuerpo humano. Por tanto, no existe evidencia científica que demuestre que la exposición a la radiación de los microondas pueda provocar cáncer u otras enfermedades.
El microondas utiliza ondas electromagnéticas de alta frecuencia para calentar los alimentos. Estas ondas producen una vibración de las moléculas de agua, grasa y otros componentes de los alimentos, lo que genera calor. Por eso, los alimentos se calientan de forma rápida y uniforme en el microondas.
En cuanto a la seguridad del uso del microondas, debemos recordar que todos los electrodomésticos que utilizamos en nuestra casa están regulados por normas y estándares de seguridad muy estrictos. Los fabricantes deben asegurarse de que sus productos cumplan con estos estándares antes de ponerlos en el mercado. Esto incluye pruebas para verificar que no se emita radiación peligrosa para los usuarios.
De hecho, la cantidad de radiación que emite el microondas es tan baja que la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos) la considera inofensiva. De hecho, la FDA tiene límites muy estrictos sobre la cantidad de radiación que los microondas pueden emitir. La cantidad de radiación que emiten los microondas está muy por debajo de los límites establecidos por la FDA, y es muy improbable que cause algún tipo de problema de salud.
Pero hay algunas cosas que debemos tener en cuenta al utilizar el microondas. Por ejemplo, debemos asegurarnos de que los alimentos estén cubiertos con una tapa o papel film antes de calentarlos en el microondas. Esto evitará que se seque o que se formen burbujas que puedan explotar y causar quemaduras. También es importante no utilizar envases de plástico que no sean aptos para microondas, ya que podrían derretirse o liberar sustancias tóxicas en los alimentos.
En resumen, la radiación que emite el microondas es completamente segura para nuestra salud. No hay ninguna evidencia científica que sugiera lo contrario. Siempre que lo usemos de forma adecuada y siguiendo las instrucciones del fabricante, no deberíamos tener ningún problema al utilizar este electrodoméstico en nuestra cocina.
4- A más barras de WIFI más rápido va
El WiFi se ha convertido en un elemento esencial en nuestras vidas. Con la popularidad de los dispositivos electrónicos, como teléfonos inteligentes, tabletas y portátiles, es crucial tener una conexión a Internet estable y rápida en nuestras casas. Sin embargo, hay una creencia común que indica que a más barras del WiFi, más rápido va. En este artículo vamos a desmentir este mito y explicar por qué no es cierto.
Antes de profundizar en este tema, es importante entender cómo funciona el WiFi. La tecnología inalámbrica utiliza ondas de radio para transmitir datos entre dispositivos. Estas ondas se emiten desde el router y son recibidas por los dispositivos que están dentro del alcance de la señal. La velocidad de la conexión depende de varios factores, como la calidad del router, la cantidad de dispositivos conectados a la red, la interferencia de otros dispositivos electrónicos, la distancia entre el router y el dispositivo, y la calidad de la conexión a Internet en sí misma.
Ahora bien, volvamos al tema principal: ¿a más barras del WiFi, más rápido va? La respuesta es no. Lo que las barras del WiFi indican es la fuerza de la señal, es decir, cuán fuerte es la señal que se recibe desde el router. Cuantas más barras haya, más cerca estará el dispositivo del router y, por lo tanto, mejor será la calidad de la señal. Sin embargo, esto no tiene nada que ver con la velocidad de la conexión.
Para entenderlo mejor, podemos poner un ejemplo. Imaginemos que estamos viendo una película en nuestro portátil y la conexión WiFi se corta continuamente. Comprobamos las barras del WiFi y vemos que estamos recibiendo una señal excelente. ¿Por qué entonces la conexión es lenta y se corta? Puede haber varias razones, como que haya muchos dispositivos conectados a la red, que alguien esté descargando archivos pesados o que la calidad de la conexión a Internet en sí misma sea baja.
Por otro lado, también es posible tener una conexión rápida y estable con pocas barras del WiFi. Por ejemplo, si estamos en una habitación lejana al router, la señal puede ser débil pero la conexión puede ser estable si no hay muchos dispositivos conectados a la red.
Entonces, ¿qué podemos hacer para mejorar la velocidad de la conexión WiFi? En primer lugar, es importante asegurarse de que el router sea de buena calidad y esté actualizado. Además, es recomendable ubicarlo en un lugar central de la casa, lejos de objetos que puedan interferir con la señal, como paredes, electrodomésticos y otros dispositivos electrónicos.
También es importante reducir la cantidad de dispositivos conectados a la red. Si hay muchos dispositivos conectados al mismo tiempo, la conexión puede ralentizarse. En este caso, es recomendable desconectar los dispositivos que no se estén utilizando o comprar un router más potente que pueda manejar una mayor cantidad de dispositivos conectados.
En conclusión, a más barras del WiFi, no necesariamente más rápido va. Las barras indican la fuerza de la señal, no la velocidad de la conexión. Para mejorar la velocidad de la conexión, es necesario tener un router de buena calidad, ubicarlo en un lugar central de la casa y reducir la cantidad de dispositivos conectados a la red.